La Fiscalía de Granada ha pedido cinco años de prisión y multa de 1.980 euros para el que fuera gerente de un concesionario en Armilla (Granada) acusado de quedarse con el dinero de la venta de cinco coches de lujo cuando fue despedido de su lugar de trabajo, concretamente con 146.600 euros.
Al procesado, de iniciales J.S.T.L., se le atribuye inicialmente un delito de apropiación indebida en su modalidad agravada, o, alternativamente, un delito de estafa, y será juzgado en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada los días 12, 13 y 14 de enero.
Según consta en el escrito de acusación provisional del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Europa Press, el inculpado fue gerente de un concesionario Mazda de la entidad Parmotor 21 SL desde 2003 hasta 2012, fecha en la que fue resuelto su contrato. Entonces, y "llevado del unitario propósito de lucrarse ilícitamente a costa del prójimo" se apropió de cinco vehículos Mazda de lujo que eran "titularidad exclusiva" de la marca comercial y que él poseía en "calidad de depósito y para uso demostrativo".
Así lo hizo con los Mazdas valorados en 24.450, 26.500, 27.325, 30.425 y 37.900 euros, respectivamente, y todo "pese a carecer respecto de todos ellos de la documentación legalmente necesaria para transmitir la titularidad de los mismos". No obstante, se apoderó, según el fiscal, de los importes percibidos por su enajenación.
Al menos tres de los compradores, que actuaron "de buena fe", no pudieron legalizar la adquisición, y queda pendiente que el acusado les reintegre el valor correspondiente a cada uno de los vehículos.
El fiscal reclama por ello cinco años de prisión y multa de 1.980 euros al acusado por un delito de apropiación indebida o, alternativamente, tres años de prisión por un delito de estafa.