La Policía Nacional ha detenido a cinco personas e investiga a una más por su supuesta pertenencia a un grupo criminal que se habría dedicado a ofrecer la obtención de permisos de residencia simulando "relaciones afectivas entre inmigrantes irregulares y ciudadanas españolas, bajo la forma de parejas de hecho".
Según ha informado la Policía Nacional en una nota de prensa, se trata de tres mujeres y tres varones de nacionalidades marroquí y española, de entre 32 y 48 años, a los que se investiga por la presunta comisión de delitos de falsedad documental y favorecimiento de la inmigración ilegal.
Los miembros de la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental ya han realizado cinco operaciones, contando esta última, desde el mes de enero por hechos relacionados con este tipo de actividad delictiva.
Las investigaciones se iniciaron como consecuencia de la comparecencia voluntaria de dos ciudadanos de nacionalidad marroquí en las dependencias de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras, quienes manifestaron que se sentían estafados por un compatriota suyo que "les había exigido la cantidad de 6.000 euros a cada uno de ellos a cambio de proveerles de la documentación necesaria para regularizar su situación de estancia ilegal" en España.
Los detenidos intentaron falsificar la documentación exigida para "poder realizar la inscripción como pareja de hecho, completando el fraude con su inclusión en el padrón de habitantes de un pueblo de las inmediaciones" de Granada capital.
El objetivo final era la obtención de una tarjeta de residencia como familiar de ciudadano de la Unión Europea y ser beneficiario del derecho comunitario, lo que significa en la práctica alcanzar la residencia legal en España y tener libertad de movimientos dentro de la mayoría de países del continente.
Las pesquisas policiales comprobaron que el principal encartado, un marroquí de 45 años y residente legal, se dedicaba a captar a posibles interesados en regularizar su situación administrativa en lugares de reunión de la comunidad marroquí de los alrededores de la capital, ofreciendo sus servicios y vendiendo que tenía "contactos" en la Junta de Andalucía y otros organismos oficiales, exigiendo a cambio de sus gestiones elevadas cantidades de dinero.
Los agentes especializados de la Policía Nacional han realizado hasta la fecha un total de cinco operaciones cuyo origen estuvo en la detección de este tipo de conductas ilícitas, las cuales tienen como denominador común un mismo 'modus operandi' en torno a la falsificación documental y a la simulación de relaciones afectivas, acumulando ya 22 detenidos.