Durante lustros la ciudadanía en general, entre la que me incluyo, construimos un marco mental sobre determinadas cuestiones basado en prejuicios o estigmas sociales que no se sustentaban en estudios científicos o estadísticas fiables. Tenemos muchos ejemplos, pero el último lo hemos conocido esta pasada semana y es para quedarse ojipláticos.
Cuántas veces hemos leído y contado que Barbate estaba completamente contaminado por los tentáculos del narcotráfico. Noticias de impacto han contribuido a ese cliché de territorio sin ley o, mejor dicho, sin respeto a las leyes. Contribuyeron decisivamente figuras de infausto recuerdo, pero gran popularidad entre los jóvenes, como Antón, un narco que se paseaba impune por las calles barbateñas paseando un cachorro de león, portando fajos de billetes en sus bolsillos y con un cuasi harem de jovencitas, algunas menores de edad.
Cuantas veces hemos contado también que había una red de busquimanos que con sus motitos recogían fardos en desembarcos de hachís mientras otros despistaban a la Guardia Civil y otros informaban a los capos de cómo avanzaba el alijo. Asimismo, hemos repetido que Barbate es el municipio de España con mayor porcentaje de ventas de motos de baja cilindrada, precisamente para desarrollar su labor de apoyo a los narcos.
Y, para colmo, el atropello mortal de una narcolancha contra una patrullera de la Guardia Civil que costó la vida a 2 agentes asesinados por indeseables. Luego llegas a una tasca del puerto barbateño y te dicen que no fue un ataque, sino la mala mar que provocó un choque fortuito entre ambas embarcaciones con la nefasta suerte del fatal desenlace de dos infortunados guardia civiles.
Todo esto es una verdad existente en esta localidad, Ahora bien, estos titulares de calado y profunda penetración social no se corresponden, como pudiera parecer a priori, con una sociedad carcomida por el narcotráfico donde no se respeta el principio de autoridad de las Fuerzas de Seguridad del Estado. Pero he aquí el último informe de criminalidad en España y adivinan: ¿cómo está Barbate?, ¿en qué lugar de ‘privilegio’ en el número de delitos por municipios? Pues ha saltado la sorpresa porque Barbate tiene unos 26 delitos por cada 1.000 habitantes, 14 puntos menos que la media nacional que se sitúa en 40 delitos. A ello debemos sumar que municipios vecinos del Campo de Gibraltar o de la Costa del Sol están también unas décimas por debajo de la media española. Sirvan estos datos para invitarles siempre a conocer estadísticas antes de emitir un juicio de valor porque les puede pasar como a mí y a mucha gente con Barbate.
