Las obras de ampliación del graderío del Estadio Municipal “Manuel Polinario” duplicarán el aforo actual y dejaran el campo de fútbol con capacidad para más de un millar de espectadores. Así lo ha adelantado el concejal de Deportes, José Antonio Gómez, que desglosó en rueda de prensa los pormenores del proyecto, unas obras que se verán complementadas con la reforma de la zona de los vestuarios, la renovación del césped artificial y la sustitución de los actuales focos por otros más potentes y de más calidad, todo ello con una inversión que superará los 300.000 euros.

Con relación al graderío, el concejal explicó que las obras llevarán aparejadas la construcción de un módulo más de asientos tanto a izquierda como a derecha, se situará una escalera lateral en cada fondo, y también se suprimirán algunas de las escaleras interiores actualmente existentes. “Además, otra de las novedades estará en el acercamiento de la grada al césped, de hecho se construirán tres nuevas filas de asientos, y los banquillos, que se ampliarán para dar cabida a todo el cuerpo técnico de los equipos, quedarán prácticamente integrados en la grada, soterrándose parcialmente y dividiéndose en dos filas”, indicó el concejal, quien argumentó que “de esta manera se hará una mayor presión sobre los equipos rivales y ello aumentará también la cercanía y el atractivo de ver el fútbol cerca de los protagonistas”.

El proyecto de ampliación, que ha sido encargado al arquitecto local Rafael Molina, permitirá que el aforo del estadio pase de los 483 asientos actuales a 1.029, una cifra que responderá así a la gran afluencia de público que semana tras semana acude al campo. El presupuesto de las obras ascenderá a 159.000 euros y también conllevará la creación de nuevos módulos para los aseos. “Actualmente nos encontramos en la fase de redacción del pliego de condiciones, y a mí, personalmente, me gustaría que este proceso no se demorara más allá de febrero, para que las obras puedan llevarse a cabo en los próximos meses y pudieran estrenarse de cara al inicio de la próxima temporada”, matizó Gómez.

Por otra parte, donde también está previsto intervenir será en la zona de vestuarios, unas obras que tendrán una partida de 78.000 euros. Según el concejal “esta remodelación no es una obra de gran envergadura, aunque se quitarán todos los tabiques de pladur que tantos problemas están dando en las zonas donde se acumula una mayor humedad, y se construirán tabiques de ladrillo, alicatándose los vestuarios con azulejos hasta una altura de 2,20 metros, con lo cual se gana en mantenimiento a largo plazo, se minimizan los problemas de fontanería y eso nos dejará un campo de fútbol de presente pero también de futuro”.