Las calles de San Fernando han vuelto a ser testigos de una nueva persecución policial que ha terminado con un accidente en la carretera Camposoto después de que el conductor del vehículo, un Seat Ibiza, perdiera el control, invadiera la acera y se estampara contra el muro exterior de una finca.
El operativo, en el que la Policía Nacional ha tenido que dar varios disparos al aire, según testigos presenciales, también ha terminado con dos agentes heridos, en principio de carácter leve, y varios vehículos policiales con daños.
Según ha confirmado la Policía Nacional, los hechos ocurrieron a primera hora de la mañana, cuando se produjo un hurto en un taller del poligono industrial Fadricas con el que relaciona al detenido, sin que hayan trascendido más detalles. Una vez desplazados varios radiopatrullas hasta la zona, hacia las once de la mañana localizaron al sospechoso en una gasolinera del mismo polígono en un vehículo robado.
Al no atender a las instrucciones de los policías, se inició una persecución en vehículo desde Ronda del Estero -donde se celebraba además el mercadillo de los jueves y los clientes observaban incrédulos la escena- hasta la carretera de Camposoto.
Fue en este punto donde era interceptado por los agentes tras estrellarse contra el muro después de haber protagonizado una fuga de película en la que el detenido llegó incluso a colarse en las explanadas del Zaporito para eludir a los coches policiales, una zona que se usa como bolsa de aparcamientos y que está contigua al mercadillo de los ambulantes.
Según las primeras informaciones de la Policía Nacional, el detenido es una persona "que carece de documentación y se están realizando gestiones para su plena identificación". Tras ser arrestado, ha sido trasladado al Hospital de San Carlos, donde permanece custodiado a la espera de ser atendido por las lesiones que presenta.
El suceso se ha producido apenas 24 horas después de que La Isla, en este caso la zona de Puerto de Palos, en la barriada del Parque, junto al CEIP Casal Carrillo, se viera envuelto en otro incidente, cuando un hombre de 34 años natural de Málaga despertó a los vecinos a primera hora pegando tiros al aire. Afortunadamente, no hubo daños personales y tras una espectacular persecución a pie fue reducido por los agentes de la Policía Local y la Nacional. Eso sí, a muchos residentes de la zona todavía les dura el susto en el cuerpo.
