La Federación de Empresas del Metal de la Provincia de Cádiz (Femca) analiza desde mediados de la semana pasada la última propuesta de CCOO y UGT para el nuevo convenio del metal. “No nos interesa dilatar” el acuerdo que afecta a 25.000 empleados, admite el secretario general de la federación, José Muñoz, con VIVA CÁDIZ. “Estamos en plena ebullición, hablamos con las empresas tractoras, tanto de las bahías de Cádiz y Algeciras y el tejido empresarial para valorar el documento”, señala.
Insiste en que hay voluntad para pactar el texto final, y remarca los avances acordados relativos a dietas, que se duplican, desplazamientos y alojamientos de trabajadores, pero también muestra su preocupación por algunas de las discrepancias existentes entre ambas partes.
Tanto para Muñoz como para el secretario general de FICA UGT Cádiz, Antonio Montoro, coinciden en señalar el plus salarial por toxicidad, penosidad o peligrosidad como uno de los asuntos de mayor importancia en el que las posturas se encuentran enfrentadas. La patronal alude al coste del mismo para las empresas y recuerda que una medida tomada sin la debida prudencia en este sentido “puede acabar por arruinar un pequeño taller”, teniendo en cuenta de que también se reclaman atrasos en 2024 y 2025. Los sindicatos, sin embargo, consideran que este plus, consolidado en el caso de los indefinidos desde 2012, debe extenderse a los fijos discontinuos.
Montoro apunta que los fijos discontinuos, además, sob objeto de debate. “Te tiras toda la vida” con este tipo de contrato, lamenta. Por lo que reitera la necesidad de abordar el número máximo de meses trabajado (algo que depende de normativa estatal, recuerda la patronal) o, al menos, mejorar sus condiciones laborales.
Con el plus de toxicidad, penosidad y peligrosidad resuelto, los sindicatos estarían dispuestos a considerar los planteamientos de Femca en cuanto al absentismo, cuestión que hay que atajar, y la formación de las incorporaciones según una tabla salarial.
Con todo, el acercamiento es palpable, no solo por los avances sobre las dietas, desplazamientos y alojamiento, sino por lo que no se señala como polémica, el incremento de la nómina de acuerdo al IPC anual. Precisamente esto fue el detonante de la huelga de 2023 en la que se registraron, además de paros, manifestaciones que acabaron en algaradas en las calles de Cádiz y Puerto Real.
Montoro advirtió hace unas semanas que, si era imposible llegar al acuerdo con la patronal, no se descartaba el inicio de movilizaciones. Femca confía en que no sea necesario llegar a este extremo. Ambas partes “podemos dar un paso más”, afirma Muñoz. El definitivo, para tener convenio hasta 2028.
