El joven atacante isleño ya coincidió con el míster bazanero Jesús Cruz Pecci en la temporada 2017/18, en la que el club aurinegro mantuvo la imbatibilidad durante 27 partidos y consiguió ganar la liga de 1ª Andaluza. Igualmente técnico y jugador coincidieron en el San Fernando CD B, consiguiendo 2 ascensos consecutivos hasta llegar a la 1ª División Andaluza.
En palabras de su nuevo entrenador, Tati es: “un extremo con desborde, buen disparo desde zonas lejanas que juega casi siempre a pierna cambiada para aprovechar esa definición al palo largo. Juego imponente de cabeza, no siendo muy alto lo domina a la perfección”, así mismo destacó su “inteligencia táctica para cerrar su banda en defensa y llegar siempre al ataque”
De igual manera, en declaraciones a este medio Tati también elogia a su míster actual: “Pecci es un entrenador que destaca porque le gusta mucho lo que hace, es una persona que se lo toma muy enserio y tiene muchas ganas de competir, y eso es muy importante porque se lo transmite a los jugadores y en esta categoría encontrar compromiso y competitividad es muy complicado ya que son categorías amateur y Pecci sabe gestionar ese compromiso de los jugadores y transmitirnos ese aire de competitividad dentro del equipo”
Pese a tener ofertas de varios equipos entre ellos el Puerto Real, el joven extremo asegura que aunque le hubiese gustado coincidir con su hermano en el equipo blanquiverde, cuando se enteró que Pecci volvía sus únicas palabras cuando lo llamó fueron “cuenta conmigo”.
Comenta que aunque no pudo seguir en el fútbol por los estudios, aprobó el año pasado las oposiciones para policía nacional, físicamente se encuentra bien y con ganas de empezar a jugar.
Su referente en el fútbol es su hermano, curiosamente llamado como él mismo, Tati Maldonado jugador del Real Betis y el Sporting de Gijón entre otros, eso y el parecido físico entre ambos ha provocado alguna situación cómica a lo largo de sus vidas en común, recuerda Tati: “cuando mi hermano jugaba en el Sporting estuve un mes allí de vacaciones e iba a todas partes con él. Recuerdo un día que me metió en el vestuario después de un entrenamiento y cuando salí todos los aficionados que esperaban en la puerta a los jugadores me pedían autógrafos, así que alguno que otro firme”, nos cuenta riéndose el flamante fichaje aurinegro.