La
capital hispalense se convierte en el escenario de visitas de todos aquellos interesados que quieran ver el trofeo que acreditará al campeón de la próxima final de la
Europa League que se disputa en Sevilla el próximo
18 de mayo entre
Eintracht de Frankfurt y el Glasgow Rangers. Una copa que dormirá en la Casa Consistorial de la Plaza Nueva de la ciudad abierto a todo el público que quiera visitarlo.
Un esperado título que llegaba a la capital en el
barco solar Guadaluxe de la mano del embajador de la Uefa, Andrés Palop, y del embajador de la RFEF, Andrés Luque, coincidiendo con el día en el que se cumplen
quince años de la victoria del
Sevilla Fútbol Club en Eindhoven,
primero de los seis que acumula el equipo.
Un centenar de niños, alumnos del
CEIF José María del Campo, esperaban su llegada a la
Nao Victoria para llevar a cabo una serie de
actividades diseñadas que, en unos días, se van a proponer en el
UELF Fan Festival, el calendario de actividades alternativas que se han programado para la dinamización de la ciudad con motivo de la final de esta competición.
Una recepción en la que también han estado presentes distintas personalidades como el delegado de Transición Ecológica y Deportes, David Guevara, la delegada de Limpieza Pública y Educación, Marisa Gómez, y el delegado de Economía, Comercio y Turismo, Francisco Páez.
El estadio
Ramón Sánchez Pizjuán acoge la final de esta competición el
próximo 18 de mayo y junto a la final de la Copa del Rey de fútbol o gala de los premios Laureus, “confirman a Sevilla como la ciudad del deporte con otro gran evento”, añade Guevara.
En esta línea, el edil de Deportes ha señalado que las “estimaciones” para la Copa de la Europa League “apuntan a un impacto económico de unos 60 millones de euros a través de la llegada de
50.000 visitantes” dato que va ligado a una proyección de esta actividad “de más de
150 millones de espectadores de
173 países a través de la televisión”.
Un “aperitivo” de algunas de las actividades de las que se podrán disfrutar el 17 y 18 de mayo, días en los que, teniendo como sede la
Plaza de España, se llevarán a cabo una serie de jornadas llenas de
exhibiciones,
sorteos,
actividades interactivas y
pantallas informativas, además de
campos de fútbol, mini fútbol y fútbol-tenis, una zona para la práctica del disparo de precisión o entrenamientos uno contra uno. Junto a ella, la Torre del Oro lucirá sobre sus muros los escudos de los dos equipos finalistas y, a su vez, la Puerta de Jerez y las Setas de la Encarnación acogerán dos trofeos gigantes, de dos metros de altura, cedidos por la Europa League.