La delegada de Presidencia y Hacienda, Sonia Gaya, ha destacado este martes que el gobierno de la ciudad despliega una política fiscal "seria, justa y adaptada a las circunstancias económicas y laborales de cada momento", ya sea la crisis por la Covid-19 "o la actual coyuntura derivada de la crisis energética y la inflación".
En esa política fiscal, según ha explicado, "se combina la necesidad de financiar la prestación de los servicios públicos municipales, la inversión como motor del crecimiento empresarial y la generación de empleo y la atención a las familias y los barrios más necesitados con la menor tributación posible de los vecinos y las empresas", ha afirmado en un comunicado.
"No tocamos ni impuestos ni tasas municipales y estamos entre las grandes ciudades españolas con menor presión fiscal", ha apostillado Gaya, al tiempo que ha lamentado la "enésima demagogia del PP al prometer una rebaja generalizada de impuestos sin concretar de dónde se sacarán los ingresos que son necesarios no sólo para atender unos servicios municipales de calidad, sino también para dar respuesta a las necesidades de las familias más vulnerables y garantizar la inversión municipal".
Asimismo, Gaya ha recordado que desde 2016, "cada año hemos ido incrementando el Presupuesto, congelando todas las ordenanzas fiscales en la ciudad, y ni siquiera tomando en cuenta la inflación. Esta estrategia ha posibilitado en la práctica la reducción de la carga fiscal para los ciudadanos y las empresas", ha asegurado.
"En cambio, la política fiscal del PP que todos conocemos y entonces sufrimos en esta ciudad fue la que desplegó entre los años 2011 y 2015, cuando aprobó un plan de ajuste presupuestario con subidas de las tasas y los impuestos e incrementó el IBI un 10 por ciento durante dos años consecutivos. Y todo derivó en un detrimento de los servicios públicos municipales", según ha abundado Gaya. "En consecuencia, el PP no puede dar lecciones de nada en materia fiscal".
En su opinión, "la política fiscal no se ejecuta a base de titulares y propuestas de trazo grueso que prometen rebajas generalizadas sin calibrar el impacto sobre los servicios públicos ni sobre la inversión municipal que se pone al servicio de la creación de economía y empleo", ha afeado la delegada al PP. Gaya ha recordado, además de la congelación de las ordenanzas fiscales del Ayuntamiento en los últimos años y válida también para este 2022, que desde la Agencia Tributaria de Sevilla se ha habilitado un sistema de abono personalizado y a la carta de los impuestos y las tasas municipales diseñado para facilitar la planificación y flexibilizar los plazos para hogares, autónomos y empresas.
Este sistema voluntario consistente en dividir el importe total de los recibos elegidos correspondientes al ejercicio en cuotas periódicas que se abonan a lo largo de todo el año, facilitando el cumplimiento de las obligaciones tributarias municipales de una forma flexible y, por tanto, conforme a la evolución de la economía familiar o los ingresos que obtengan empresas o autónomos.
Gaya ha insistido en que la política fiscal puesta en marcha contribuye a la captación de inversiones para la ciudad. Como prueba, en 2021, a pesar de la pandemia de la Covid-19, en la Gerencia de Urbanismo se otorgaron licencias para proyectos de inversión valorados en 230 millones de euros.
La delegada, por último, ha recordado las "numerosas" iniciativas fiscales de reducciones, bonificaciones, fraccionamientos e incluso exenciones en todos los impuestos y tasas municipales puestas en marcha durante la pandemia de la Covid-19 "para amortiguar la caída de ingresos de empresas, autónomos y hogares por la crisis económica y laboral", ha concluido Gaya.