La Guardia Civil ha detenido a ocho personas acusadas de robo de 25.000 kilos de naranja tras interceptar en la localidad sevillana de Carmona un furgón lleno de naranjas sustraídas. Entre los detenidos figuran dos receptadores de la mercancía robada y un cómplice para la ejecución de los robos.
Según informa el Instituto Armado en un comunicado, la investigación se inició cuando una patrulla de la Guardia Civil interceptó un furgón con más de 3.000 kilos de naranjas cuya carga fue decomisada al no poder su responsable acreditar la procedencia de la mercancía.
A partir de ahí, agentes del Equipo Roca iniciaron investigaciones para localizar a los propietarios del cítrico y realizaron dispositivos de vigilancia en el entorno del vehículo y sus ocupantes, que permitieron detectar movimientos constantes hacia explotaciones ubicadas en el término municipal de Carmona.
Una vez localizado el origen de la naranja, los agentes averiguaron que, para acceder a la finca, los autores se valían del código del candado de la cancela de entrada, facilitado previamente por una persona relacionada con la explotación.
Todo ello permitía a los autores sustraer gran cantidad de naranjas que posteriormente vendían a dos establecimientos ubicados en Sevilla capital. La operación culminó con la detención de ocho personas, cinco relacionados con la autoría de los robos, una como cómplice al facilitar el número del candado y dos como receptadoras del material sustraído.