La Esperanza Macarena ha recibido
la mayor distinción que puede tener una imagen mariana. El Vaticano le ha
otorgado en la mañana de hoy la Rosa de Oro en un acto sencillo pero lleno de significado.
Al filo de las 13:45, monseñor
Edgar Peña, Sustituto de Asuntos Generales de la Secretaría de Estado de la Santa Sede, hacía entrega de la Rosa de Oro a la Esperanza Macarena. El mismo hacía alusión en el texto recibido por parte del Papa Francisco que esta es una "distinción que se
entrega a los grandes santuarios y grandes advocaciones de la Virgen María con su pueblo", aludiendo que esta es "una llamada para profundizar la devoción mariana y vivir todos como Iglesia, atentos a las
necesidades de los demás". "La virtud de la Esperanza hace que cuando más dificultades tenemos, más voluntad ofrecemos. Por eso decimos que
la Esperanza nunca muere, el optimismo sí", ha disertado Peña Parra durante su homilía, previa a la entrega de la Rosa de Oro.
Tras la colocación de la Rosa de Oro a los pies de la Santísima Virgen,
la Basílica se ha envuelto en aplausos, vítores y ¡guapas! a la Esperanza Macarena. Además, han sido lanzados en distintos puntos del barrio.
A la finalización del acto, el Arzobispo de Sevilla,
D. José Ángel Saiz Meneses ha agradecido esta distinción al Santo Padre y a monseñor Edgar Peña Parra que ha sido "las manos y los pies del Santo Padre entre nosotros". Ha reafirmado que esta distinción "nos llena de júbilo, la Rosa de Oro es símbolo de amor, de sacrificio".
Durante la ceremonia ha intervenido la
Coral Polifónica de la Hermandad.
De esta manera, la Virgen de la Esperanza se convierte en la primera dolorosa en
obtener esta distinción y la tercera imagen en España a la que se le concede la Rosa de Oro
tras la Virgen de la Cabeza de Andújar y la Virgen de Montserrat de Barcelona.