En el último programa de La Pasión, se abordó
una interesante hipótesis sobre la figura de San Juan Evangelista en la Semana Santa sevillana: su posible primera representación escultórica en un paso de palio podría haberse
dado en la Hermandad del Gran Poder.
El historiador Rafa Ríos explicó que “la primera representación
posiblemente sea la de la Virgen del Mayor Dolor y Traspaso con la imagen de San Juan que hiciera Juan de Mesa”, una composición que
se alejaría de la iconografía actual de la Calle de la Amargura y que respondería, en cambio, a una visión plenamente barroca. “Muy posiblemente fuese
una Virgen desmayada, recogida por San Juan Evangelista, lo que
justificaría las grandes dimensiones de esta talla”, añadió Ríos, recordando grabados del siglo XVIII donde ya aparece esta imagen.
Este planteamiento se ve reforzado por el simbolismo de la advocación “Mayor Dolor y Traspaso”, basada en la profecía de Simeón: “Y a ti,
una espada te atravesará el alma”. La escena representaría, por tanto, el momento en que
el apóstol consuela a la Madre de Dios tras la Pasión.
El padre Antonio Romero Padilla aportó también
una lectura teológica y emocional de San Juan. “Era su pater familias,
el tutor legal de María tras la muerte de Jesús”, explicó. Añadió que, aunque tradicionalmente lo percibimos como joven, para la cultura judía de la época
San Juan era ya un hombre "hecho y derecho". “Es el que narra el entierro de Cristo como
el entierro de un rey. San Juan ve al Mesías en su humillación”, señaló.
Romero Padilla destacó que “San Juan es
el primero que cree en la resurrección” y que su Evangelio, profundamente simbólico, “nos habla del jardín, de la vestidura blanca, del rey sepultado como los reyes de Judá”. También subrayó que, aunque fue el primero en llegar al sepulcro,
esperó a Pedro por respeto a su primado apostólico, un detalle revelador de su humildad y madurez espiritual, reconociéndolo como el primer encargado del ministerio Petrino.
Vuelve a ver el
último programa de La Pasión.