Un equipo de neumólogos del
Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla ha liderado un
ensayo clínico internacional donde se ha demostrado que una
dosis reducida de un anticoagulante (Apixabán) es igual de "eficaz" que la dosis estándar para prevenir la reaparición de trombos en pacientes con
cáncer activo.
Según detalla el Hospital Virgen del Rocío en una nota de prensa, el estudio, denominado
'API-CAT', ha incluido a
1.766 pacientes con cáncer activo que ya habían completado al menos seis meses de tratamiento anticoagulante tras haber sufrido una
trombosis venosa profunda o una
embolia pulmonar. Algunos de ellos tomaron una dosis de 2,5 mg dos veces al día, frente a otro grupo al que se le administró 5 mg dos veces al día. Posteriormente, fueron seguidos durante un año adicional.
La investigación, llevada a cabo entre octubre de 2018 y septiembre de 2023 en
121 centros médicos distribuidos en
once países, ha reforzado "la solidez y aplicabilidad internacional de los resultados". De hecho, el porcentaje de pacientes que ha sufrido un nuevo evento tromboembólico fue "bajo" en ambos grupos:
2,1% con la dosis reducida y 2,8% con la dosis completa.
Asimismo, los
episodios de sangrado "clínicamente relevantes" han sido "significativamente menores en el grupo de dosis reducida":
12,1% frente a 15,6%. La
mortalidad a los 12 meses sí fue comparable:
17,7% con la dosis reducida y 19,6% con la dosis completa. Aun así, "ligeramente inferior" cuando se minimiza la toma del fármaco.
En este sentido, se da la circunstancia de que los
pacientes con cáncer han presentado un riesgo "elevado" tanto de trombosis como de hemorragias, por lo que
ajustar el tratamiento anticoagulante a largo plazo resulta "crucial".
Aunque las
guías clínicas han recomendado "mantener la anticoagulación mientras el cáncer esté activo", hasta ahora no han existido evidencias claras sobre si "una dosis menor podía ofrecer un buen equilibrio entre eficacia y seguridad" y además con un
fármaco oral, lo que ha facilitado la comodidad del tratamiento.
La investigación ha sido diseñada y coordinada por la
Assistance Publique-Hôpitaux de París (AP-HP). Del mismo modo, ha sido financiada por la
alianza Bristol-Myers Squibb-Pfizer, que no ha participado en el diseño, análisis ni redacción del estudio. La diversidad de centros y países participantes reflejan la "representatividad real" de los pacientes con cáncer en tratamiento anticoagulante.
Tal ha sido la "magnitud de este estudio" que los resultados se han publicado en
The New England Journal of Medicine, "una revista científica de primer nivel", tal como añade el comunicado.