Facua Sevilla ha realizado un estudio sobre 24 establecimientos ubicados en el recinto ferial y sus alrededores, además de en siete casetas públicas de libre acceso que el Ayuntamiento hispalense mantiene abiertas en el Real, en las que ha detectado "algunas irregularidades que vulneran la normativa que protege los derechos de los consumidores", ante lo que menciona la exposición "inadecuada" de productos perecederos.
En rueda de prensa, el portavoz y secretario general de Facua Sevilla, Rubén Sánchez, ha dado a conocer esta información y ha esperado que las autoridades competentes inspeccionen los establecimientos del recinto ferial para "verificar las faltas observadas, llevando también a cabo medidas para garantizar que dejen de producirse, así como para que, de ser necesario, se abran expedientes sancionadores a sus responsables".
Así, desde Facua se señala que la evaluación de los 24 puestos comerciales visitados que se dedican a la venta directa al público de productos comestibles ha arrojado que "en ninguno de ellos" se protegen alimentos a granel sin envasar, tales como los trozos de coco, los altramuces y las chufas, "carentes de vitrinas de cristal que eviten su deterioro y el peligro de un contacto directo de los transeúntes, con el consiguiente riesgo de contaminación de dichos alimentos y pudiendo dar lugar a intoxicaciones u otros problemas derivados de salud".
Además, indica que sólo en uno de ellos de las tradicionales manzanas recubiertas de chocolate son "debidamente" presentadas en plásticos de celofán, "quedando expuestas sin envoltura en el resto de los establecimientos analizados". El resto de los productos a la venta disponen de envolturas plastificadas, según detalla. Por último, afirma que la exposición al público de los precios de los productos que se venden en los 24 puestos evaluados cumple con la normativa, pudiendo ser consultados por los clientes "sin dificultades".
PRECIOS, ALCOHOL Y TABACO
En lo que se refiere a la inspección de las seis casetas públicas que representan los once distritos de la ciudad y a la perteneciente al Área de Fiestas Mayores y Turismo, Facua Sevilla asegura que ha comprobado que "en todas ellas se cumple satisfactoriamente" con las condiciones exigidas en cuanto a visibilidad de los carteles que informan de la existencia de hojas de reclamaciones, del mismo modo que los que advierten de la prohibición de fumar, los que recuerdan la obligación de no vender alcohol a los menores de 18 años y los que señalan la disponibilidad de equipos de desfibrilación, equipos sanitarios que convierten a estas casetas en "espacios cardioprotegidos".
Sobre la exhibición de los precios de las comidas y bebidas, las listas oficiales están acordadas por el propio Ayuntamiento y publicadas en la web municipal, "obligando a que sean respetadas y no alteradas, siendo esta norma común y de obligado cumplimiento para las siete casetas revisadas", según explica. No obstante, señala que la ubicación y dimensiones de las tablas de precios "no permiten su fácil lectura" en dos de las casetas, concretamente en las del Área de Fiestas Mayores y Distrito Nervión-San Pablo, "no contando los clientes en ninguna de ambas con un óptimo acceso a esta información".
En el capítulo de la conservación de los alimentos, observa como "un incumplimiento común" a las siete casetas la "no disposición de protecciones para productos perecederos y no envasados, como es el caso de las almendras fritas y aceitunas, en contacto con el aire en bandejas que no cuentan con vitrinas habilitadas para tal cometido".
Asimismo, agrega que no se ha observado "ningún incumplimiento" en la prohibición de fumar en las casetas de entrada libre visitadas por Facua Sevilla, ni usuarios ni camareros, atendiendo con ello lo establecido en la Ley 42/2010, de 30 de diciembre.
"PROBLEMAS" CON LIMPIEZA Y DISPONIBILIDAD DE ASEOS
En otro orden de cosas, Facua apunta al estado de limpieza y suministro de material higiénico en los aseos de las casetas municipales, visitadas antes de las 13,00 horas del mediodía, resultaron "inadecuados". "Faltaba en todos papel higiénico, jabón, secamanos y en cinco de las siete casetas analizadas se detectaba suciedad, restos de papeles y vasos en el suelo", insiste.
Asimismo, Facua Sevilla ha detectado que los trabajadores encargados de los servicios hasta la hora de cierre a las 3,00 de la madrugada "siguen manteniendo la costumbre de pedir una cantidad voluntaria a los usuarios para su utilización, incluso con carteles en todos los baños que indican literalmente 'La voluntad, gracias'". "Se trata de una práctica que desde Facua se considera inadmisible, máxime tratándose de establecimientos de titularidad municipal", sentencia.
De este modo, espera "un año más" que la Administración inspeccione los establecimientos señalados para "subsanar las irregularidades observadas y, de ser necesario, aplicar las sanciones establecidas en la normativa vigente".