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Andalucía

Las familias dueñas de Abengoa se quedarán sólo con el 1,25%

Los bancos agrupados en el G-7 y los bonistas pactan entre ellos una vía de reestructuración financiera: los segundos aportarán 1.200 millones y asumirán el 55% de la firma. Inversión Corporativa, socio mayoritario histórico controlado por los Benjumea, podría doblar ese peso dentro de cinco años

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  • felipe benjumea (derecha) -

Los siete bancos españoles principales acreedores de Abengoa (agrupados en el G-7) y los fondos tenedores de bonos de deuda de la compañía han alcanzado un principio de acuerdo para reestructurar financieramente la empresa y tratar de evitar que entre en concurso el próximo lunes 28 de marzo. Ambos grupos de acreedores suman el 40% de los 16.627 millones de pasivo total de la empresa, y necesitan alcanzar un acuerdo que aune al 75% para que el juez de lo Mercantil de Sevilla que gestiona el preconcurso autorice un futuro pacto.

Una consecuencia clave de ese preacuerdo es que las cinco familias andaluzas que controlan Abengoa prácticamente desde su fundación hace 75 años, agrupadas en la empresa Inversión Corporativa, retendrán sólo un 1,25% de la futura Abengoa. En el pacto se prevé que los actuales accionistas de Abengoa -tanto IC, que posee el 26% de las acciones, como el resto de socios minoritarios- se queden con el 5% de las nuevas acciones. IC, que tiene una cuarta parte del capital actual, poseerá así sólo una cuarta parte de ese porcentaje: un 1,25%. IC tiene a su vez como primer accionista a la familia Benjumea, cuyo principal representante Felipe -presidente durante 25 años- dejó todos sus cargos de responsabilidad la semana pasada abriendo así paso al preacuerdo.

Su sucesor es Antonio Fornieles, quien trabajó casi tres décadas en KPMG, la firma de asesoría que debe presentar al juez un plan global de reestructuración que aúne las posturas de los acreedores y la empresa. Los actuales accionistas de Abengoa, en cualquier caso, podrán doblar su peso en el capital de la empresa, hasta el 10%, si se cumple el plan de viabilidad completo y se paga toda la deuda (tanto la que existía, como la que se genere para reactivar la empresa). IC pasaría así a tener en un lustro un máximo del 2,5%.

Reparto

El nuevo socio de control de la futura Abengoa, con un 55%, será el grupo de fondos de inversión internacionales que han comprado bonos de deuda de la compañía en la última década. Tendrán ese porcentaje porque aportarían 1.200 millones de dinero nuevo. Encontrar a quien aportara esos fondos era otro escollo clave que se habría superado, aunque el interés exigido por los bonistas supera el 15% a cinco años, plazo establecido para la devolución.

El segundo mayor socio de la futura nueva Abengoa será el grupo de acreedores actuales, que tendrá el 40%. Un 35% procederá de la deuda que siga viva -tras una quita (perdón) del entorno del 70%- que se cambiará por acciones. Y otro 5% corresponderá a los acreedores actuales que aportarán -fundamentalmente bancos- avales por 800 millones para reactivar la empresa.

El pacto incluye una tercera pata, junto a la liquidez nueva por 1.200 millones y los avales por 800 millones: la refinanciación de los 500 millones en créditos concedidos desde el pasado verano para que la empresa siguiera operando. En esta cifra se incluye un nuevo préstamo de 110 millones -que aportarán igualmente los bonistas-. Esta refinanciación se ha pactado repartiendo entre bancos y bonistas las acciones de Abengoa Yield (principal filial de la empresa) que estaban ya dadas en prenda para ir consiguiendo esa liquidez.

La empresa ha caído el miércoles en bolsa un 12,6%, a 0,32 euros, tras dispararse un 145% en tres días.

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