El aumento de los precios en la cesta de la compra está afectando a la ciudadanía, pero especialmente a familias con pocos recursos que no pueden cubrir los gastos de alimentación. Este hecho se ha notado en el incremento de peticiones de ayuda en la fundación '
Tocan a mi puerta'.
El delegado diocesano de Inmigrantes en la diócesis de Valencia, Olbier Hernández, ha advertido en
Noticias 8 Mediterráneo que las peticiones de ayuda han aumentado y ha señalado que el perfil de las personas que solicitan esa ayuda ha cambiado. "Ya no son inmigrantes y sin papeles o españoles que han recibido ya las ayudas y han terminado con ellas, sino personas que están trabajando y que no pueden llegar a cubrir las necesidades básicas de alimentación porque el trabajo de una familias les permite pagar el alquiler, agua, luz y gas, pero no pueden tener una dieta equilibrada", ha expuesto.
Hernández ha comentado que reciben ayuda del Banco de Alimentos de Valencia, pero asegura que es "
pobre y pequeña" y "con muchas limitaciones". "Es tristísimo que en la ciudad se esté invirtiendo en obras, parques o jardines, pero que no haya dinero destinado a los más vulnerables", ha expresado.
El delegado ha señalado que la fundación es promotora de los derechos y la igualdad de las personas, pero sobre todo garante de su integración. Hernández ha explicado que eso pasa por garantizar que "las personas puedan tener techo, comida, asistencia sanitaria" y ha apuntado que "
esto para muchas personas no es posible, aunque pensemos que sí".