La Audiencia de Alicante ha impuesto siete años de cárcel a un individuo por dedicarse a distribuir anfetaminas, que vendía por la ciudad trasladándose con un patinete eléctrico.
Este hombre había sido detenido el pasado 28 de febrero sobre las 17.20 horas en la calle Sierra de Mariola después de que una pareja de la Policía Nacional le observara signos de nerviosismo cuando se cruzaron, según la sentencia facilitada a EFE.
Los agentes le dieron el alto, le cachearon y detectaron que portaba en el bolsillo del pantalón una bolsa con 3,78 gramos de anfetaminas con una pureza del 17,3 por ciento, que presuntamente estaban destinadas a su venta al menudeo.
Un día después, la Policía Nacional registró su domicilio con permiso judicial y se halló más de un kilogramo de anfetaminas, además de distintas cantidades de ketamina y de cannabis que, en su conjunto, habrían adquirido un precio de 31.128 euros en el mercado ilícito.
La defensa del acusado planteó en el inicio del juicio la nulidad del procedimiento, como cuestión previa, al argumentar que el registro del domicilio del acusado se había practicado sin el preceptivo consentimiento, pero el tribunal ha rechazado esa solicitud ya que ese registro se había realizado con las garantías legales e, incluso, con la presencia de la asistencia letrada del arrestado.
Además de la condena de siete años de prisión, el tribunal añade una multa de 60.000 euros que se convertirían en un día de privación de libertad adicional por cada 100 euros en caso de impago, en un fallo recurrible en apelación en diez días ante el Tribunal Superior de Justicia valenciano (TSJCV).
Por su parte, la sentencia absuelve a la pareja del acusado, que convivía con él en el mismo domicilio, al no ver elementos de prueba suficientes que demuestren que tuviese conocimiento de la presencia de la droga, ni del uso que pretendía darse.
