En la mañana de este martes 27 de mayo, El Colorado se convirtió en el foco de una reivindicación que lleva demasiado tiempo silenciada. Decenas de personas marcharon desde el Carrefour hasta la rotonda del Labriego con pancartas, globos azules como símbolo del autismoy un sonido constante de latidos que marcaba el paso de una movilización por la justicia educativa. La exigencia era clara: la creación inmediata de un aula TEA (Trastorno del Espectro Autista) en el CEIP El Coloradocarente de un recurso básico para garantizar una educación verdaderamente inclusiva.
Los manifestantes portaban mensajes directos como “Todo por nuestros niños y niñas”, “Por una educación inclusiva de calidad”. El ambiente estuvo marcado por un latido reproducido por altavoz, símbolo del corazón colectivo que late por la inclusión.
Frente a la puerta del CEIP El Colorado, punto final del recorrido, se leyeron varios manifiestos. Lucía Narváez, presidenta de la Federación Local de Asociaciones de Familias del Alumnado (FLAFA), expresó con contundencia:“¡Se acabó el silencio! Hablamos por quienes no pueden expresarse con palabras, pero lo dicen todo con la mirada. Un aula TEA no es un lujo. Es una necesidad urgente. Es un derecho básico. Es la forma más real de decir: tú también importas”.
El texto exigía recursos suficientes, atención especializada, respeto a los ritmos y formas de comunicación de cada alumno, y, en definitiva, una educación pública, digna, inclusiva y real.“Hoy las voces silenciadas han hablado. Y ya no volverán a callar”, proclamó Narváez entre aplausos.
También tomaron la palabra madres del alumnado afectado, como Ana del Valle, quien compartió la desesperación que viven muchas familias:“Nuestros niños no pueden esperar más. Esto no es un capricho. Es una necesidad. Necesitamos ese aula y la necesitamos ya. Por favor, que nos escuchen. No sabemos qué más hacer”.
Fátima Rodríguez agradeció el apoyo de quienes asistieron y lanzó un último mensaje cargado de urgencia:“Repetimos lo mismo una y otra vez, porque no hay respuesta. Solo pedimos tranquilidad, saber que el próximo curso nuestros hijos estarán bien atendidos. Queremos una confirmación. Queremos certezas. Nuestros niños lo merecen”.
Al finalizar el acto, los asistentes colgaron las pancartas en la puerta del colegio, como símbolo de una reivindicación que permanecerá visible. Carteles con frases como “Rompamos juntos las barreras por el autismo” o “” quedaron enla entrada del centro.
En este contexto, la ciudadanía se ha dirigido directamente al presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, para recordarle que los menores con necesidades específicas de apoyo educativo no pueden ser tratados como cifras en una estadística, sino como sujetos de pleno derecho. La exigencia es clara: una respuesta urgente, con voluntad política y sensibilidad social, que garantice los recursos necesarios para una educación inclusiva real en el municipio de Conil.
Por otro lado, el Ayuntamiento de Conil ha mostrado su apoyo institucional a la demanda de creación de un aula específica para alumnado con Trastorno del Espectro Autista (TEA) en el municipio, una reivindicación impulsada por las AMPAs locales y que ha sido respaldada por una manifestación celebrada esta mañana en la zona de El Colorado.
Varios concejales del equipo de gobierno han estado presentes en la concentración, en la que se ha leído un manifiesto en defensa de una educación inclusiva. En el texto, se ha subrayado que la implantación de un aula TEA en Conil “no es un lujo, sino una necesidad urgente”.
Desde el Consistorio se ha reiterado el compromiso con esta causa, reclamando a las administraciones competentes que doten al municipio de los recursos necesarios “para garantizar una educación digna, inclusiva y adaptada a las necesidades de todo el alumnado”.
"Seguiremos trabajando de la mano con la comunidad educativa para que Conil cuente con ese aula TEA y sea un referente de igualdad y derechos en materia educativa", ha señalado el Ayuntamiento en un comunicado.
