Alcanzado el ecuador de la campaña olivarera en Alcalá la Real, es momento de hacer balance de la marcha de la misma. Cristóbal Cano, secretario local de la Unión de Pequeños Agricultores, ha valorado positivamente la marcha de la presente temporada, que, en sus propias palabras, “ha venido a enmendarse en las últimas semanas gracias a las últimas lluvias”. No en vano, y pese a un otoño extremadamente seco, el invierno que se iniciaba el pasado 21 de diciembre ha coincidido con un cambio de tendencia, de tal modo que desde el inicio del año agrícola se superan ya los 200 litros / m2 recogidos en nuestra localidad, una cifra más cercana a los parámetros normales, después de unos meses de octubre y noviembre sin apenas precipitaciones que han mermado el fruto de forma sustancial en determinadas zonas.
“En cuanto al aceite, esta lluvia no va a suponer una gran diferencia, pero en cuanto al árbol, que estaba ya muy agotado, si ha resultado muy beneficioso, ya que la planta se ha estirado”, ha señalado Cano.
Pese a la sequía soportada, se espera que el aceite de la presente campaña sea de una excepcional calidad, “casi todo virgen extra”. El problema, como viene siendo habitual, sigue siendo el precio, que en estos momentos se sitúa alrededor de los dos euros el kilo, una circunstancia que el propio Cristóbal Cano no duda en calificar como “una vergüenza”. No obstante, las previsiones apuntan a que, a medida que avance el año, el precio se vaya situando más cerca de los 2,5 euros, ya que, las previsiones del mercado apuntan ya a una campaña 2014-2015 que podría moverse en torno al 40 o 50% de la actual, por lo cual, en parte, en estos momentos “se estaría recogiendo la cosecha de dos años”, y al haber el próximo año menos aceite disponible, la relación entre la oferta y la demanda hará que se tienda a esta fluctuación al alza de los precios, especialmente a partir de junio, según se espera dentro del sector.
El rendimiento, que se está situando como media entre el 21 y el 22% ha bajado aproximadamente un punto recientemente, pero sigue siendo muy bueno. Estas cifras invitan a esperar una cosecha cercana a la producción récord alcanzada en nuestro municipio, y que podría estar finalmente entre los 105 y los 110 millones de kilos, lo que vendría a traducirse en más de 20 millones de kilos de aceite. Esta producción equivaldría a unos ingresos de unos 50 millones de euros para las productores.
Como es lógico, la importante campaña tiene también una significativa repercusión sobre el empleo, y de hecho, lo que desde UPA se lamenta es la estacionalidad de este cultivo, que sólo permite alcanzar este gran nivel de ocupación en el municipio durante un período que este año oscilará entre los 40 y los 60 días, según las zonas. Teniendo en cuenta que entre el 30 y el 40% de la cosecha se recoge dentro de la agricultura familiar, la campaña de recogida de la aceituna puede generar este año en Alcalá más de 140.000 jornales, lo que se traduciría en una cifra cercana a los 7 millones de euros en salarios. Otra fuente de empleo son también las almazaras, en donde hay empleadas durante estos meses unas 100 personas en nuestro municipio. Pese a la difícil situación económica y al excedente de mano de obra, en palabras del secretario local de UPA en Alcalá, el actual convenio, que establece ligeramente por encima de los 50 euros el jornal diario, se está respetando en la provincia de Jaén, a diferencia de otras provincias, en las que está habiendo presiones contrarias a ello.
