Un padre, de 49 años, y una madre, de 53 años, están acusados de agredir sexualmente a su hija menor de edad, desde que tenía 5 hasta los 9 años cuando se denunció el caso. A él le reclama el Ministerio Fiscal seis años de cárcel como autor de un delito de agresión sexual, mientras que a la madre le pide la misma pena por supuestamente conocer lo que estaba pasando y no hacer nada para evitarlo.
Ambos progenitores se han sentado este martes en el banquillo de los acusados de la Audiencia de Jaén aunque finalmente se ha suspendido el juicio una vez que el Ministerio Fiscal ha pedido que se devuelva la causa al juzgado de instrucción para que se coteje el ADN masculino hallado en la menor con el del padre, que por esta causa lleva en prisión preventiva desde 2023, según relata Europa Press.
A los argumentos del Ministerio Fiscal se ha sumado también la acusación particular ejercida por la Junta de Andalucía, administración que asumió la tutela de la menor. El tribunal, tras escuchar a las partes, ha acordado la suspensión del juicio y la devolución de la causa al juzgado instructor.
Una vez se realice el cotejo del ADN, se dictará un nuevo auto de procedimiento abreviado y la causa regresará a la Audiencia de Jaén para que se señale la vista y se pueda celebrar el juicio.
A la vista de la suspensión, la defensa del acusado ha pedido la puesta en libertad del padre a la espera de que se realice el cotejo y lleguen los resultados. El Ministerio Fiscal se ha opuesto a la excarcelación por considerar que no ha cambiado la situación respecto a cuando se dictó el ingreso en prisión preventiva y que la víctima, a de hoy, sigue siendo una menor "vulnerable e influenciable", además de existir "indicios suficientes" para acreditar la culpabilidad del acusado.
Según relata el Ministerio Público en el escrito de calificación recogido por Europa Press, la menor contó lo que le estaba ocurriendo a su madre sin que ésta "interviniese para evitar la repetición de dichas conductas".
En noviembre de 2023, cuando la menor tenía nueve años, contó a algunas maestras de su colegio lo que le estaba pasando, dando lugar a la correspondiente denuncia y a la detención del padre, que a día de hoy sigue en prisión preventiva.
Por estos hechos, además de los seis años de prisión para los dos progenitores, el Fiscalía reclama para ambos la privación de la patria potestad y la prohibición de acercarse y comunicarse con la menor por un periodo de cinco años superior a la pena de prisión.
Además, en concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Público reclama que los acusados indemnicen a la menor en 15.000 euros.
Por su parte, la acusación particular ejercida por la Junta de Andalucía reclama para los dos acusados una pena de siete años y cinco meses de cárcel por un delito de agresión sexual en el que se imputa al padre como autor y a la madre por omisión, al ser supuestamente conocedora de lo que ocurría por boca de su propia hija y no hacer nada al respecto.
