La noche comenzó con unas palabras que resonaron profundamente: ''Cocinar es un acto de amor'', señaló José Ramón Rosado, concejal de Turismo, marcando el inicio de una de las noches más esperadas del año en Conil: la Gala del Turismo. Este evento, se ha convertido en una tradición que los conileños anhelan desde que arranca el año. Cada evento, cada ruta gastronómica que tiene lugar durante los meses previos, aviva aún más el deseo de que llegue este día tan esperado, donde el esfuerzo y la dedicación de muchos se ven finalmente recompensados.
La gala fue un homenaje a quienes han participado y ganado en las distintas rutas gastronómicas, y una ocasión para reconocer el papel crucial de aquellos que, año tras año, contribuyen al crecimiento y desarrollo turístico del municipio. Se entregaron distintos premios en diversas categorías, destacando primeros, segundos y terceros lugares para quienes sobresalieron en las competiciones culinarias organizadas durante el año.
Sin embargo, uno de los momentos más emotivos fue cuando se otorgó el Premio Local de Turismo a la Asociación Los Borriquetes, una agrupación formada por cocineros de distintos restaurantes locales que lleva más de 10 años trabajando en Conil, como bien expresó José Sánchez, uno de los representantes de la asociación, ''es un orgullo recibir este reconocimiento, son muchos años ya los que llevamos aquí. Y por si alguien no lo sabe, nos llamamos Los Borriquetes en honor al pescado borriquete de Conil, un producto que antes no recibía mucha atención, pero que hemos trabajado para poner en valor, y creo que lo hemos conseguido''.
En su intervención, la alcaldesa de Conil, Inmaculada Sánchez, ofreció un discurso lleno de orgullo y agradecimiento: ''Nos enorgullece poder decir que hemos superado las expectativas con más de 110.000 visitantes, lo que refleja el creciente atractivo de nuestro municipio como destino turístico de calidad''. Este éxito, según la alcaldesa, no es casualidad, sino el resultado del esfuerzo de toda la población, especialmente del sector de la hostelería, quienes día a día se esfuerzan en ofrecer lo mejor a los visitantes que llegan atraídos por la belleza, la cultura y, sobre todo, la gastronomía de Conil.
Uno de los hitos más destacados de la gala fue el reconocimiento de Conil como 'Ciudad Gastronómica Española de 2024': ''este reconocimiento celebra nuestra rica herencia culinaria y pone de relieve la excepcional calidad de nuestros productos locales, tanto marinos como agrícolas. Conil es un lugar único, abrazado por el mar y la huerta, donde la variedad de hortalizas, verduras, pescados y mariscos frescos hacen de nuestra gastronomía una experiencia inolvidable para quienes nos visitan’'', señaló la alcaldesa.
Inmaculada Sánchez informó que, desde el Ayuntamiento, se está trabajando en la elaboración de un Plan Estratégico de Turismo, cuyo objetivo principal es que la calidad prevalezca sobre la cantidad, ''ya estamos viendo los frutos de nuestras acciones, con la desestacionalización del turismo, extendiendo las visitas a lo largo de todo el año, y permitiendo que Conil no solo sea un destino de verano. Sin embargo, hay aspectos que aún debemos abordar con seriedad, como el tema de las viviendas turísticas, para garantizar que nuestro modelo turístico siga siendo equilibrado y sostenible, sin perder la esencia de lo que nos hace únicos'', expresó la alcaldesa.
El éxito de la gastronomía en Conil no sería posible sin sus ya consagradas rutas: la Ruta del Atún, la del Retinto, la de la Huerta, la Ruta de la Tapa y las Jornadas del Pescado de Conil. Cada una de estas rutas es una celebración de los sabores auténticos que definen la identidad del pueblo, un homenaje a la tierra y al mar, a los productos que surgen de ellos y a las manos que los transforman en verdaderas obras de arte culinarias.
Y mientras la noche concluía, las palabras de Rosado seguían presentes, recordándonos que, en Conil, cocinar es verdaderamente ''un acto de amor'' , y no podría haber sido más cierto. Ser cocinero es mucho más que una profesión; es una pasión que exige dedicación, paciencia y cariño. En ocasiones, cocinamos para aquellos que queremos con más empeño que para nosotros mismos. A veces, incluso, un plato se convierte en una forma de pedir perdón, porque sabemos que la comida tiene un poder especial para sanar, unir y reconciliar. Como bien dice el dicho, ''las penas, con pan, son menos penas'', y en Conil, cada plato lleva consigo una parte del corazón de quienes lo preparan.
La Gala del Turismo 2024 fue, sin duda, una celebración que mostró lo mejor de Conil: su gastronomía, su hospitalidad y la unión de su gente. Año tras año, los conileños son testigos de cómo este pequeño rincón del sur de España se convierte en un referente, no solo turístico, sino también cultural y humano, donde la gastronomía es, sin duda, una experiencia que va más allá del simple acto de comer; es una inmersión en la cultura, la historia y el alma de todo un pueblo.
