Necesitaba el Jaén CB regresar a casa para hacer que las sensaciones cambiaran el rumbo de su trayecto en esta temporada. Eran buenas, pero se esfumaban en el último minuto y eso le hizo perder dos partidos que tenía en la mano en Alhaurín y Armilla. Pero el cómo solucionarlo estaba en La Salobreja. Allí se rodearon los rojos de esa fiel afición a la que no querían fallarles. El curso pasado ya se fueron cada sábado a casa con esa sonrisa que pintan las canastas de un equipo que se quedó a las puertas de meterse en la lucha por el ascenso a la LEB Plata. Certezas de un curso pasado que en el envite ante el CB Marbella volvieron a producirse en el parqué de la cancha jiennense.
El triunfo se fraguó en defensa, con un equipo que no dio un balón por perdido y al que no le tembló la mano a la hora de buscar el aro rival. Un rival fuerte y potente ante el que los rebotes fueron fundamentales para cimentar el primer triunfo en casa de una temporada en la que la remontada de los jiennenses comienza a percibirse. Lejos de casa, el equipo está solvente pero le falta aún rematar como lo hizo el sábado ante el Marbella.
Y lejos de casa es donde falla la sección de baloncesto del Jaén Paraíso Interior que cayó en ante Murgi y perdió el liderato que logró la pasada jornada ante La Zubia, que ha recuperado el primer lugar de la clasificación. Los amarillos solo tienen triunfos en La Salobreja y todavía no se han estrenado lejos de casa.