El recurso de alineación indebida de Marko Milovanovic ‘Marezi’ en el Almería B no ha prosperado y el Juez único de Competición ha desestimado el recurso que presentó el Real Jaén el pasado lunes. El club de La Victoria había solicitado que se estudiara la situación del jugador serbio, que esta temporada había actuado en 10 partidos de Liga en Primera División y uno de la Copa del Rey con el UD Almería. El motivo no era otro que la posibilidad de que la Academia tuviera la condición de filialidad y no de dependencia, por lo que la posibilidad de ganar el partido del pasado 8 de junio estaba en el aire.
El Juez único de Competición realizó la incoación del expediente, trasladando al Área de Licencias de la RFEA la petición de realizar un informe sobre Marezi y al UD Almería el mismo para que realizara las alegaciones pertinentes. Así las cosas, el UD Almería presentó la inscripción del jugador serbio para jugar en su equipo dependiente de Tercera Federación, así como los partidos que ha disputado con el primer equipo y exponiendo que no existe filialidad entre UD Almería y UD Almería B, sino dependencia y formando parte de la misma estructura donde se subraya domicilio, instalaciones, jeraquía directiva, inscripción federativa…
Así las cosas, y según el artículo 251 del Reglamento de la RFEF, Marezi puede alternar el primer equipo con el segundo en todos los partidos que su club estime oportuno, algo que no ocurre si hubiera sido filial del UD Almería, donde una vez disputados más de 10 partidos ya no podría participar en una categoría inferior, ya que el filial según el artículo 250 es un club que tiene una estructura diferente. Por todo ello, y con el complemento del informe del Área de Licencias de la RFAF, la inscripción del jugador está correcta, por lo que la resolución final es la de desestimar la reclamación del Real Jaén.
3,5 millones de euros
La figura de Marko Milovanovic es la de un delantero serbio que el Almería firmó tras el abono de 3,5 millones de euros al Partizán de Belgrado por una de las grandes promesas del fútbol de su país. La alternancia con el primer equipo esta temporada ha llegado ante las lesiones que el UD Almería ha sufrido en Primera División. Incluso, el joven jugador anotó un tanto contra el Sevilla y ha formado activamente del primer equipo después de superar una lesión durante dos meses. La pasada temporada comenzó en la disciplina del primer equipo, pero no convenció a Rubí y tras la llegada de Luis Suárez bajó al filial porque el Almería no tenía fichas libres en Primera División, teniendo cubiertas las 25 licencias permitidas en la máxima categoría del fútbol español. Como ya hemos relatado en otras ocasiones, el jugador serbio tuvo que ponerse a las órdenes de Óscar Fernández en la campaña 2022-23 donde desplazó del segundo equipo rojiblanco a Longonda para tener licencia con la que poder competir en Tercera Federación.
Filiales y dependientes
La diferencia entre este tipo de denominaciones en los equipos solo estriba en la cantidad de partidos que los jugadores pueden jugar con el equipo matriz, grosso modo. Pero provoca un agravio comparativo con el resto de clubes que tienen que competir contra equipos dependientes, con un presupuesto superlativo y que impide al resto de clubes de ciudades poder crecer en el fútbol. La gran mayoría de clubes que no están dentro del entramado del fútbol profesional llevan reclamando la creación de una competición exclusiva, si los jugadores pueden subir y bajar al primer equipo sin problema de sumar partidos, para los equipos B. Una fórmula que en el resto de Europa se practica y que no hace posible que los equipos dependientes jueguen en otras condiciones económicas contra los clubes que compiten por el sueño de ascender. El caso Marezi, que parecía claro a todas luces, deja también patente que esa diferencia presupuestaria entre clubes implica que haya que jugar contra equipos dependientes cuyo presupuesto es sideral respecto al de otros más humildes. Un aspecto que quizás sí que haya que tratar con más celeridad que el de presentar recursos por alineaciones indebidas y que los clubes modestos no se cansan de solicitar ante la RFEF, que sigue con un reglamento tan enrevesado que hace que estas reclamaciones no se detengan en la que el Real Jaén ha presentado sin éxito.
