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Málaga

Chupete vale su peso en plata (2-1)

El canterano del Málaga CF sella una permanencia (que sigue sin ser matemática del todo) gracias a un doblete de 'killer'

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  • Chupete, delantero del Málaga, anotó un doblete. -

El Málaga CF será de Segunda División la temporada que viene. A no ser que se dé una carambola de dimensiones kafkianas (cuádruple empate a 52 puntos), el cuadro de Martiricos estará en el fútbol de plata. Lo hará, en gran medida, gracias a una actuación estelar de un Chupete que ascendió a la categoría de ídolo tras un doblete que sirvió para obrar la remontada ante el Sporting de Gijón.

La Rosaleda vivió este sábado una noche de emociones fuertes, de las que hacen afición. El Málaga, tras una primera parte espesa y sin apenas ocasiones claras, tiró de casta y corazón para remontar un partido que se había puesto cuesta arriba con el tanto de Otero para el Sporting. Lo hizo gracias a la irrupción estelar de Carlos Ruiz Rubio, “Chupete”, que firmó un doblete inolvidable y permitió al conjunto blanquiazul sumar tres puntos vitales en la lucha por la permanencia.

Con más de 23.000 espectadores en las gradas, el ambiente era el de las grandes citas, aunque el equipo no terminó de arrancar en los primeros 45 minutos. Pese a las intentonas de Larrubia, Chupete y un inspirado Álex Pastor en la zaga, el equipo de Pellicer apenas inquietó a Rubén Yáñez. Tampoco el Sporting hizo mucho más, aunque gozó de alguna ocasión aislada al contragolpe.

El golpe llegó al poco de iniciarse la segunda mitad. Juan Otero, con un potente cabezazo, adelantó a los visitantes en el minuto 60, obligando al Málaga a lanzarse con todo. Pellicer reaccionó de inmediato con un doble cambio ofensivo, y la respuesta no tardó en llegar.

A los 67 minutos, un genial taconazo de Chupete tras asistencia de Larrubia encendió La Rosaleda. El empate espoleó a los locales, que crecieron en intensidad y fe. El segundo llegó a seis del final: Víctor García centró desde la izquierda, y Chupete, con sangre fría, controló y definió raso con la derecha. Gol, éxtasis en las gradas… y amarilla por quitarse la camiseta.

Con el 2-1, el equipo supo sufrir. Antoñito pudo sentenciar en el descuento y el Sporting tuvo un tanto anulado por fuera de juego. Pero el marcador ya no se movería. El pitido final certificó una victoria tan trabajada como celebrada.

Ahora, el Málaga mira de reojo al resultado del Eldense, que podría sellar la permanencia de forma matemática. Pero independientemente de lo que ocurra, La Rosaleda ya tiene nuevo héroe: Chupete.

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