Bomberos forestales han vuelto a las calles, esta vez en Jaén, donde se han concentrado frente a la Delegación del a Junta en Jaén para denunciar el deterioro progresivo de sus condiciones laborales y la gestión que consideran “negligente y peligrosa” por parte del Gobierno andaluz y de la nueva Agencia de Medio Ambiente y Agua (EMA). Bajo el lema “Estamos quemados”, la protesta ha reunido a trabajadores del Plan Infoca, convocados por la CGT, con el objetivo de exigir mejoras urgentes ante una campaña de incendios que comienza sin garantías ni medios suficientes.
Denuncian la "falta de medios impresionante" con la que afrontan la campaña de incendios forestales. Según han manifestado, los Centros de Defensa Forestal (Cedefos) están "vacíos", carecen de equipos de protección individual (EPI), y cuentan con vehículos nuevos que no pueden utilizarse ni por falta de personal ni por no ser aptos para terrenos forestales.
Cristóbal Lendínez, secretario general de Campo, Agricultura, Ganadería y Pesca de CGT-Jaén, ha sido el encargado de trasladar estas críticas a los medios durante una concentración frente a la sede de la Junta en la capital jiennense. Esta movilización forma parte de una serie de protestas convocadas por el sindicato en toda Andalucía, sin descartar la convocatoria de huelga. Lendínez ha calificado de "pura parafernalia" los anuncios del Gobierno andaluz, criticando que el aumento presupuestario anunciado por el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, "no se refleja en los medios reales del dispositivo". "Se dice que se han invertido 100 millones más, pero ¿dónde está ese dinero?", se ha preguntado.
Como ejemplo, ha citado la adquisición de 102 furgonetas para desplazamientos a incendios que, sin embargo, "no pueden llegar a primera línea de fuego" por ser vehículos de carretera. “En cuanto se encuentran un desnivel, se paran por seguridad”, ha explicado. Según CGT, esta situación ha llevado al sindicato a interponer una querella criminal en los juzgados de Sevilla para depurar responsabilidades.
También han denunciado la existencia de camiones valorados en 450.000 euros que permanecen paralizados por falta de dotación humana, así como la inactividad de la bolsa de empleo y los retrasos en la incorporación del personal fijo, aún pendiente de los reconocimientos médicos.
La precariedad afecta directamente a los retenes, que según el sindicato deberían contar con siete integrantes, pero actualmente operan con cinco o incluso tres. “Esto repercute en la operatividad del servicio y en el descanso del personal, rompiendo cualquier posibilidad de conciliación”, ha subrayado Lendínez.
En este contexto, ha acusado a la Junta de falta de previsión y de "no tener a nadie al volante" tanto en el Ejecutivo autonómico como en la Agencia de Emergencias de Andalucía (EMA). Ha insistido en que “nunca antes” se había visto a personal del Infoca sin EPIs, obligados a permanecer en los vehículos sin poder intervenir.
Entre otras demandas, CGT reclama la convocatoria urgente de concurso de traslados, bloqueado desde hace tres años, y el reconocimiento de la antigüedad laboral, que cifran en 17 millones de euros.
Por todo ello, el sindicato exige la dimisión de Antonio Sanz y reclama medidas urgentes que refuercen un dispositivo clave en la lucha contra los incendios forestales. En palabras de Lendínez, lo que está ocurriendo con el Infoca es un proceso de “desprestigio para llevarlo a la privatización”, una dinámica que, denuncia, ya se ha visto en sanidad y educación.
“Estamos aquí defendiendo lo público porque el monte es público, no es de unos pocos. Y nuestra obligación como trabajadores públicos es estar aquí, protegiéndolo”, ha concluido
