La pasada semana falleció uno de los exjugadores más emblemáticos del Recreativo de Huelva, el cordobés Rafael Benitez Madrid, al que me unía una estrecha amistad desde los años sesenta cuando recaló en Huelva precedente del Ecijano, tras haberlo fichado Borrego. Benitez fallece después de muchos años padeciendo una enfermedad.
Rafael, inició su andadura deportiva en el equipo de su barrio, El Colombia de la Huerta de la Reina de Córdoba, luego fichó por el Ecijano, para recalar en Huelva.en la temporada 1959-60, su pasó por el Recreativo marcó el devenir del club en su historial, pues no en balde marcó el gol del triunfo frente al Ferrol en Galicia, que le dio al Decano el ascenso a Segunda división.
Su brillante trayectoria en Huelva no pasó desapercibida por el equipo de su tierra, el Córdoba, donde fue traspasado, equipo que entonces militaba en Primera división, coincidiendo con un equipo de lujo jugadores de la talla de Reina, Simone, Mingorance, López, Tejada, Ricardo Costa, Jara, Luis Costa, Juanin, Miralles y Cabrera. Atlético de Madrid y Valencia se interesaron por sus servicios, pero se antepusieron los intereses del Córdoba porque en el club verdiblanco lo consideraban imprescindible.
Tres temporadas estuvo el jugador exrecreativista en el equipo de su ciudad, , para ser cedido luego al Melilla tras una lesión, luego pasó por el Torrelavega en Segunda división. Estos serian sus últimos destinos. Benitez colgó las botas con veintinueve años porque aprobó unas oposiciones a la banca.
Trabajó en la banca en Huelva y paralelamente sacó en titulo de entrenador de fútbol y entrenó al juvenil y al primer filial del Recre, también a la Palma, Niebla Isla Cristina y Trigueros. Benitez durante su permanencia en la cantera del Recreativo realizó una labor encomiable, sacando a jugadores de la talla de Sevilla Beker, Toledano, Carrasquilla, Molina, etc. llegando a dirigir al juvenil del Recre en la división nacional. .
En mis crónicas relativas a los partidos del primer equipo juvenil del Recre, y al citar a Rafael Benitez en su labor, solía llamarle “el zorro”, por sus grandes conocimientos del fútbol cantera.
Rafael estaba casado con María Dolores Castejón Pou, tuvo cinco hijos, Celia, Dolores, Lourdes, Ana y Belén. Dolores vive en Córdoba, y el resto de sus hijos en Huelva. No puedo finalizar estas esforzadas líneas sin trasmitir mi más doloroso pésame a su señora, María Dolores Castejón, por tan sensible pérdida, así como a todos sus hijos. Descanse en paz.
