El viejo cauce del río Guadaíra fluye de nuevo para unir, esta vez, a los barrios del Sur de Sevilla. Este nuevo parque, situado en la zona Sur de la ciudad, pone el broche final a la labor desarrollada por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y el Ayuntamiento de Sevilla para la restauración de los espacios fluviales degradados de la capital hispalense.
Una iniciativa que ha supuesto una inversión de más de 110 millones de euros y que ha permitido la recuperación de más de 425 hectáreas de zonas verdes que históricamente conformaban la red fluvial de Sevilla.
Los desvíos y canalizaciones que a lo largo del pasado siglo ha ido realizando la ciudad de Sevilla para defenderse de las inundaciones que provocaban los cauces que la atravesaban, el Tamarguillo, Tagarete, Miraflores, Ranillas, Guadaíra y, por supuesto, el Guadalquivir, han ido dejando una serie de cicatrices que debían ser integradas en la morfología de la ciudad.
Con su recuperación, estos trazados fluviales han pasado a vislumbrarse como aliados y parte fundamental de la fisonomía y del carácter de Sevilla y de los sevillanos.
Concretamente, en 1950 se desvió el río Guadaíra que, en su desembocadura, producía importantes daños a las barriadas colindantes. Desde este momento, el abandono progresivo del curso antiguo del río fue derivando en una zona urbana desestructurada, con problemas de comunicación, espacios degradados y que daba lugar a graves problemas de cohesión social.
Es por ello que la actual recuperación del Parque Río Guadaíra supone un gran paso para la ciudad de Sevilla. El Parque Río Guadaíra no es sólo una zona verde más. Se trata de un gran espacio que cohesiona y vertebra zonas urbanas, permitiendo la integración de los vecinos con su ciudad.
En él interaccionan elementos como la SE-30, el paso de la línea de ferrocarril Sevilla-Cádiz e instalaciones militares y portuarias, por lo que constituye un elemento de integración fundamental para romper con las barreras físicas y arquitectónicas que históricamente dividían esta parte de la ciudad.
El Parque Río Guadaíra pone en valor 60 hectáreas de zonas verdes que se extienden a lo largo de 3 kilómetros de longitud, desde la Avenida de la Paz hasta la Avenida de La Raza, posibilitando la interconexión de las barriadas periféricas que hasta ahora bordeaban este gran vacío urbano, como el Polígono Sur, Heliópolis, Los Bermejales, Pedro Salvador y Elcano.
De este modo, se ha creado un nexo de unión transversal que permite el flujo entre los barrios vecinos, conectando y favoreciendo la integración de las zonas más deprimidas de la ciudad.
En definitiva, un espacio en el que interaccionan numerosos y diversos elementos activadores de la vida vecinal y la convivencia, potenciadores de un modo de vida conectado a la naturaleza y los valores medioambientales que ponen las bases de mejores posibilidades de futuro para todos los ciudadanos de Sevilla.